Gracias por cuidar mi portería

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Gracias Asenjo, mil gracias. Y, sobretodo, mejórate. No es fácil llegar donde has llegado. No es un puesto sencillo el tuyo y, otra vez, como en cada ocasión que estás al borde de rozar el cielo, una lesión. No te imaginas cómo sufrí cuando te oí gritar en el último partido. Tu dolor, tu sufrimiento, tu rabia, tu impotencia… Sentí todo eso a través de la pantalla y sé, que al igual que yo, lo hicieron cientos. Tu desesperación fue mía y me dio mucho coraje entender que la Selección no iba a contar contigo en un tiempo. Ahora que estabas convocado, ahora…

Gracias por estar bajo los palos cuando ha hecho tanta falta. Gracias por cubrir la retaguardia. No solo ahora que vistes de amarillo, tú cuidas de los otros diez siempre. La defensa del Villarreal estaba tranquila, tú estabas detrás por si, llegado el momento, todo fallaba.

Es curioso como tu lesión puede ser una metáfora de la situación de este equipo. Arrancaron imparables, demostrando ese juego que enamora a propios y extraños. Los jugadores se esfuerzan sobre el campo y no es fácil. Con una plantilla que no es ni galáctica ni tiene a ningún Balón de Oro, han despertado la admiración en muchos. Es curioso además porque, aunque a veces el resultado no ha sido una victoria, el buen juego y el esfuerzo ha arrancado de las bocas de los que aman (amamos) el fútbol un: «¡Cómo juega el Villarreal!».

Por eso te repito una vez más Sergio: gracias. Volverás de nuevo y más fuerte que nunca. Las esperanzas de este submarino al que has conquistado, dependerán de ti. Estuviste al borde de no volver a jugar, pero eres un ejemplo en el mundo del fútbol. Tu capacidad de superación, de levantar la peor de las rachas y volver a tu nivel, es la envidia de muchos y el camino a seguir para todos aquellos deportistas que sufren un duro golpe. No todos son grandes estrellas, otros son más terrenales y atraviesan los momentos más duros. Volver a comenzar es posible. Cuesta mucho, tú mismo lo has confesado, pero se puede. Por eso y por muchas cosas más que no caben en estas líneas, solo cabe darte las gracias de nuevo y decirte que te esperamos sin falta cuando acabe tu recuperación.