Me dedico profesionalmente al hockey sobre patines desde los 18 años. Es un deporte minoritario en el que la fiesta va por barrios. Hay sitios de Europa en los que si juegas al hockey eres un personaje conocido y admirado entre tus vecinos, como pasa en Oporto o en Forte dei Marmi –ciudad del equipo en el que milito actualmente-. En otros, como en la mayoría de los rincones de España -aunque curiosamente somos la selección campeona del mundo por quinta vez consecutiva- la gente ni siquiera sabe que en su ciudad existe este deporte, así que ni por asomo se imaginan que algunos, pocos, nos ganamos la vida con esto.

A mis 34 años tengo claras mis tres pasiones: el hockey, la familia y el REAL MADRID. De ahí que lleve este escudo tatuado en mi brazo. Soy un fiel seguidor del conjunto blanco y estoy ahí en las buenas y en las malas. Y ahora estamos en las segundas. Parece contradictorio porque atravesamos un mal momento pero seguimos primeros en la clasificación.

El rollo que os he soltado hasta ahora es simplemente para poneros en situación. Soy un profesional del deporte. Y si quisiera celebraría mi cumpleaños. Eso sí, en el siguiente partido soy el que más corre, porque mis patines son el alimento de mi familia, y con eso sí que no juego.

El Real Madrid perdió un partido de máxima rivalidad en el Calderón por una abundante goleada de 4 a 0. Un partido que valía 3 puntos, ni uno más ni uno menos. Está claro que un derbi es un derbi y que todos quieren ganarlo por el honor de tu equipo. Supongo que aquí se nota que soy madridista como el que más pero no soy madrileño y puedo cuantificar la gravedad de los hechos sin que el corazón intervenga. Se perdió un partido. Eso es lo que veo. Y se perdió justamente. Eso SÍ me preocupa, no quién nos ha ganado sino porqué. Como jugador, si me ganan por correr más que yo o por pelear más las bolas divididas…me decepciono a mí mismo. Y a mi equipo solo le pido lo que a mí me exijo: Compromiso. El Real Madrid puede perder, pero NO puede correr menos que el rival o luchar menos que el contrario. Porque fichan a los mejores para que se comporten como lo que son. Y quienes visten la elástica blanca deben estar a la altura de su escudo y su historia.

No me gustó el Madrid del Calderón pero tampoco el que se midió al Sevilla o al Dépor. Este Madrid no es el equipo unido del 2014 en el que todos iban a una. Y eso sí debe preocupar al aficionado.

Aún así, como deportista profesional sé que en la planificación de una temporada hay picos de intensidad y rendimiento para los jugadores, y que eso solo lo conocen quienes lo gestionan. Puede que el Madrid no atraviese su mejor momento físico pero esto forma parte de la estrategia del cuerpo técnico para que lleguen en su momento más alto del año al tramo final en el que se deciden los títulos.

Todo seguidor de un club opina, y en nuestro derecho estamos, pero no manejamos la suficiente información como para hacerlo con fundamento así que debemos valorar las opiniones en su justa medida. No nos pongamos nerviosos que lo mejor está por llegar.

Fdo. Pedro Gil www.pedrogil9.com  @9pedrogil

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