Juntos de la mano por el parque de El Retiro, le asombraba esa primavera en esplendor en uno de los parques más bellos que jamás había visto. Él venía de la cuna del arte, pero la alegría que desbordaban los madrileños entre barquillos y organillos hacía que sintiera la Grande Belleza por doquier, con su palpusa recién comprada a un joven que vendía junto a la puerta de Alcalá, me sorprendió.

Ya no supe qué decir en toda la tarde, solo tenía nervios, quería que llegara la hora, iba a ser la noche más bella que jamás había imaginado. Yo, una telefonista, andaba por la calles de Madrid con aquel piloto italiano y me había hecho el mejor de todos los regalos. Por fin llegamos a aquel palco donde hasta tres veces sentí el rugir. Dos goles de Paco y uno de la Saeta Rubia nos dieron la segunda Copa de Europa.

Segunda Copa de Europa del Real Madrid, 30 de Mayo de 1957. (Santiago Bernabéu)

Sobre El Autor

Lara Molina

“La camiseta del Real Madrid es blanca, se puede manchar de barro, sudor y hasta de sangre, pero nunca de vergüenza.” Santiago Bernabéu.

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