Sencillamente: Ibrahimovic

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Ibrahimovic. Internacional con Suecia en más de 100 ocasiones. Delantero titular con el PSG. Ídolo en su país y en el fútbol. Pese al carácter soberbio que el sueco muestra en el 100% de las ocasiones, tiene ese lado canalla que logra arrebatar la simpatía de aquellos que ven en él al futbolista, al genio del balón, al goleador nato. Zlatan es capaz de echarse él solo a los equipos a sus espaldas y, con esa carga, llevarlos a la victoria. Hace no mucho lo volvía a hacer con Suecia, sellando su pase a la Eurocopa de Francia 2016 con un espectacular gol de falta, que fue el último de una larga lista.

De su boca, que suele ser casi siempre la que le pierde, salen por norma los comentarios más ofensivos hacia el rival. «Los daneses me querían jubilar, pero he jubilado a todo su país», sentenciaba Ibrahimovic tras derrotar a Dinamarca en la repesca. Así. Como si no fuera a doler a nadie. Como si no acabase de terminar con las ilusiones de toda una nación. Pero Ibra es como es. Irreverente. Indomable.

Futbolísticamente, es complicado aportar datos sobre él que nadie conozca. Sus inicios fueron en un viejo conocido de Atlético de Madrid y Real Madrid: el Malmö, rival de ambos clubes españoles en las dos últimas Champions League. Pero al margen de esto, Ibrahimovic es un ídolo absoluto en su país natal. Tanto es así que cuenta con su propio verbo. La Academia de la Lengua de Suecia añadió, junto a 39 nuevas palabras, el término ‘zlatanear’. Su significado es sencillamente genial: dominar con fuerza. Sin embargo, la cosa no acaba aquí. Aunque en el Barcelona no terminó de hacer amigos por su carácter, en Francia la estrella del PSG ha conquistado sus corazones. El dueño del Doddy’s Café, en pleno corazón de París, creó una hamburguesa inspirada en él. Al parecer, la «fuerza» de su sabor recuerda al descaro de Zlatan.

Sin embargo, lo más llamativo de todo es que Ibrahimovic tiene su propio buscador de Internet. Al más puro estilo Google, unos ingenieros crearon un buscador basado en los algoritmos del mismo. En él puedes encontrar absolutamente todo lo relacionado con Ibra. Si buscas coches, entre los que posee en propiedad el jugador aparecerán también sus infracciones, como cuando huyó de la policía a 325 km/h. Si buscas taekwondo, encontrarás que el futbolista es además cinturón negro en este deporte. Si el término a encontrar es Barcelona o Real Madrid, podrás ver que se llegó a inventar su fichaje por el club blanco para marcharse de la entidad culé. Una auténtica Biblia para los incondicionales del futbolista. Cualquier cosa que quieras saber de él, está ahí.

Así es el amor que despierta Zlatan en sus seguidores. Porque por encima de su carácter rebelde, de su descaro con la prensa, de su prepotencia a la hora de definirse a sí mismo, está el corazón de este sueco, que se vuelca con los desfavorecidos, que lucha por la grandeza de su país y que, por encima de todas las cosas, nos hace disfrutar a los que amamos el fútbol. Yo, desde luego, sueño con verle en mi club, pese a que hace ya tiempo dijera que nunca ficharía por él. Pero qué le vamos a hacer. Es Ibrahimovic.